Resumen: La gran mayoría de las mujeres recluidas en las prisiones de México presentan una gran cantidad de trastornos de salud mental y adicciones, así como dificultades para acceder al tratamiento para
este tipo de problemas. Los antecedentes personales y las condiciones de reclusión de estas mujeres reflejan los problemas no resueltos del país como son educación y analfabetismo, acceso a la salud, vivienda e inequidad en los sistemas de procuración de justicia.